* ¿Qué significa el Dragón para el Feng Shui y la Astrología China

El año 2012 llega rodeado de una atmósfera de misterio y predicciones apocalípticas. Se dice que, de acuerdo con el calendario Maya, implica el final de una era o un cambio profundo en la sociedad humana. Para el calendario chino el 2012 será el año del Dragón, que coincidentemente es un signo asociado a la transformación y el cambio.
No es infrecuente que el advenimiento de un año del  Dragón genere expectativas de cambio: el último año Dragón fue el 2000 y todavía recordamos lo mucho que se habló de las vicisitudes o aún catástrofes que traería consigo el final del milenio. No fue para tanto entonces y de allí podríamos inferir que tampoco será para tanto ahora. El Dragón es el quinto signo o rama terrestre del zodíaco chino, en una secuencia que comienza con la Rata. Es uno de los cuatro entierros o depósitos, junto con el Buey, la Oveja (o Cabra, es lo mismo) y el Perro. Le corresponde la dirección sudeste. Forma un triángulo armónico junto con la Rata y el Mono; combina con el Gallo.
En el feng shui, el término dragón se usa ampliamente, tanto para designar montañas como ríos o cursos de agua. Es un término que en sentido amplio puede asimilarse a la expresión de una fuerza de la naturaleza. En muchas leyendas chinas, los dragones tienen una actitud compasiva hacia el ser humano: al contrario de los dragones de las historias medievales en Europa, que exhalaban fuego por la boca, raptaban princesas y aterrorizaban a todos; el dragón de la mitología china es compasivo y está más bien vinculado al agua y a sus benéficos efectos.
El nombre de la rama terrestre correspondiente al Dragón es Chen. Es notorio que corresponde al único animal fantástico de todo el zodíaco, y este hecho merece una explicación. No se trata de una explicación esotérica, tiene que ver con la forma en que los astrónomos chinos observaban el cielo. Si te animas, allá vamos, no es una explicación simple, pero es real.
Al Dragón le corresponde el tercer mes del año en el calendario chino, del 4 de abril al 4 de mayo. El final del tercer mes y el principio del cuarto tenían un significado especial para los astrónomos de la antigua China. Para ellos, la constelación más importante era una especie de cucharón de siete estrellas (en la foto puedes verla tal como se ve hoy día). De espaldas en el piso y mirando al cielo, el cucharón parece girar como la manecilla de un reloj, apuntando al centro del cielo y recorriendo en sentido antihorario las doce divisiones del cielo correspondientes a los doce signos del zodíaco chino. Así, el cucharón de estrellas recorría los doce sectores, uno cada mes, como una especie de reloj cósmico (quien sabe si no es ése el origen de nuestros relojes analógicos).
Por otro lado, el plano terrestre también estaba dividido en doce sectores, asociados a los puntos cardinales, al Dragón le corresponde aproximadamente el sudeste. Una vez al año, en un día que se encontraba siempre entre el 3º y 4º mes del año (entre el mes del Dragón y la Serpiente) se producía una coincidencia exacta entre la división del cielo y la de la Tierra y cada sector del cielo ocupaba así su punto cardinal correspondiente. No solamente eso, sino que ese día marcaba además el fin de la primavera y el comienzo del verano. Como el año chino comienza con la primavera, ese día del mes del Dragón marcaba la primera gran transformación del año. Por eso, el Dragón simboliza la transformación y tiene un carácter mágico.
¡Uf! Menuda explicación. Pero estamos dispuestos a desmitificar a la astrología china para que deje de ser un divertimento y comience a ser reconocida como una ciencia. Vamos más lejos, entonces. El hexagrama[1] que  corresponde al Dragón se llama Resolución. La imagen del mismo es el lago sobre el cielo. Simboliza el momento en que el agua se ha acumulado en el cielo, en forma de nubes, hasta un punto tal que la tormenta es ya inevitable. Representa la irrupción de algo que ha acumulado tensión durante largo tiempo, como una tormenta que estalla, o un río que desborda. Es lo que podemos esperar del año del Dragón. Como rige sobre la casa de la fortuna y como este año la estrella 5-amarillo la visita también, es probable que las mayores transformaciones las veamos en el terreno de las finanzas.
Es tiempo de resolución. En las sociedades, puede representar el momento en que los justos deciden actuar con fuerza pero sin violencia para poner en evidencia y someter a los corruptos. A nivel individual, significa que el año del Dragón nos da la oportunidad de encontrar la fuerza para superar nuestras propias debilidades y limitaciones, para transformarnos, superarnos y así alcanzar un nivel mayor de felicidad.
 
[1] Los hexagramas son símbolos formados a partir de la combinación de seis líneas enteras o cortadas. Son 64 en total y forman el I Ching o Libro de las Transformaciones, uno de los clásicos chinos más importantes. Hay doce hexagramas, llamados tidales, que corresponden a los doce signos del zodíaco chino.
 
        
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