(cOsAsDiveRTIdAs:231246) * Que oculta el linchamiento del maquinista
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viernes, 2 de agosto de 2013* Que oculta el linchamiento del maquinista
"Están utilizando al maquinista como chivo expiatorio; aquí hay intereses políticos y económicos ocultos"
Carlos Vázquez, hijo de una fallecida en el accidente, cuenta su visión de la tragedia // "El maquinista lo tiene que estar pasando mal" // "Nos llamaron para 'hacer la foto' en el funeral, pero no para recoger las pertenencias"
Carlos Vázquez cumple hoy 40 años. Es, probablemente, su aniversario más doloroso. A la celebración estaba invitada Blanca, su madre, pero no ha podido asistir. La desgracia se cruzó en su camino hace una semana, cuando volvía desde Madrid tras ver una exposición en el Museo Reina Sofía. Blanca es una de las decenas de víctimas que no ha sobrevivido al tragico accidente de tren de Galicia. Su fallecimiento, como tantos otros, ha dejado destrozada a la familia.
"Siempre que ves estas cosas en la televisión lo ves como algo ajeno, pero nunca te imaginas que te puede tocar", explica Carlos, mientras sigue, una semana después, rellenando papeleo y atendiendo a los trámites burocráticos que ocasionan este tipo de sucesos. Vecino y concejal de Tui (Pontevedra), Carlos no sabía que su madre iba en el tren siniestrado cuando el suceso se dio a conocer. "Nos enteramos a las 9 de la mañana del día siguiente; una amiga la esperaba para cenar en La Coruña; fue ella quien nos avisó", relata.
A continuación, los familiares de Blanca, Carlos incluido, sufrieron la angustiosa espera en el edificio de confinamiento de Cersia, junto al resto de allegados. La fatal noticia llegó a las 5 de la tarde. "Los psicólogos teorizan mucho, pero honestamente prefería la incertidumbre previa que la certidumbre de saber que tu madre ha muerto", confiesa.
A pesar de la dolorosa vorágine de estos días, a Carlos le ha dado tiempo para ver las noticias sobre el accidente en los diferentes medios. Algo le extrañó desde el principio: "Creo que están utilizando al maquinista como chivo expiatorio; que algunos medios, especialmente afines al poder, estén machacando al maquinista, oculta intereses políticos para asignarle la culpa y también económicos de los consorcios españoles que compiten por las adjudicaciones de AVE a nivel internacional", opina, molesto. Y es que Carlos no es ingenuo; sabe cómo funciona la política, más que nada porque, aunque no a nivel profesional, se dedica a ella: Carlos es presidente de Converxencia XXI, un partido galleguista que presentó su candidatura en cuatro municipios en las pasadas elecciones de 2011.
"Está claro que es responsable (el maquinista) del accidente, pero no al 100%. Esto no es un coche ni un autobús; en este tipo de trenes todo va muy automatizado, prácticamente pueden circular solos, sin ayudas; aquí ha habido un evidente error en el diseño de seguridad; ¿que aún así el maquinista debería tener memorizado el recorrido y tenía que haber estado 'al loro'? Pues sí, pero los sistemas fallaron", asevera.
Durante, la conversación, Carlos remarca una y otra vez su convencimiento de que Francisco José Garzón no tiene toda la culpa. Entonces todavía no sabía que en el momento del accidente el maquinista hablaba con un interventor de Renfe. "Si no es un psicópata, que lo dudo mucho, lo tiene que estar pasando muy mal, debe de ser una sensación muy distinta que la de un familiar, pero tiene que ser muy duro, el saber que él podría haber evitado el incidente", reconoce Carlos, que ve, en todo esto, algunas coincidencias con otra tragedia pasada, en aquel caso medioambiental: la del Prestige.
"En aquel momento el que estaba en el juicio era el capitán, cuando en realidad estaba cumpliendo órdenes de las autoridades españolas; quien debería de haber estado imputado era Francisco Álvarez-Cascos", recuerda. "Estoy bastante convencido de que lo de ahora ha sido una chapuza donde estaban mezclando la alta velocidad con otros aspectos de vía convencional; nos lo vendieron como alta velocidad y nos hemos enterado de que era mentira", critica.
Con todo, lo que más le duele a la familia de Blanca es el tratamiento recibido por las autoridades tras el accidente. "Se nos llamó para ir al funeral oficial, para la foto, pero no para recoger las pertenencias de mi madre; nos tuvimos que enterar por la prensa. Es vergonzoso", lamenta.
Durante, la conversación, Carlos remarca una y otra vez su convencimiento de que Francisco José Garzón no tiene toda la culpa. Entonces todavía no sabía que en el momento del accidente el maquinista hablaba con un interventor de Renfe. "Si no es un psicópata, que lo dudo mucho, lo tiene que estar pasando muy mal, debe de ser una sensación muy distinta que la de un familiar, pero tiene que ser muy duro, el saber que él podría haber evitado el incidente", reconoce Carlos, que ve, en todo esto, algunas coincidencias con otra tragedia pasada, en aquel caso medioambiental: la del Prestige.
"En aquel momento el que estaba en el juicio era el capitán, cuando en realidad estaba cumpliendo órdenes de las autoridades españolas; quien debería de haber estado imputado era Francisco Álvarez-Cascos", recuerda. "Estoy bastante convencido de que lo de ahora ha sido una chapuza donde estaban mezclando la alta velocidad con otros aspectos de vía convencional; nos lo vendieron como alta velocidad y nos hemos enterado de que era mentira", critica.
Con todo, lo que más le duele a la familia de Blanca es el tratamiento recibido por las autoridades tras el accidente. "Se nos llamó para ir al funeral oficial, para la foto, pero no para recoger las pertenencias de mi madre; nos tuvimos que enterar por la prensa. Es vergonzoso", lamenta.
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